La progesterona es una hormona esencial en el sistema reproductor femenino, conocida como la “hormona del embarazo“. Esta hormona cumple un papel vital tanto en el ciclo menstrual como durante el embarazo, lo que la convierte en una aliada indispensable en los tratamientos de fertilidad.
Si estás explorando opciones para cumplir el sueño de formar una familia, entender cómo funciona la progesterona puede ayudarte a tomar decisiones informadas y sentirte más segura en este camino; bien sea para someterte al tratamiento hormonal o evaluar otras opciones.
En el siguiente artículo, te contamos todo lo que necesitas saber acerca de esta hormona y sus implicaciones para la gestación.
¿Qué es la progesterona y para qué funciona?
La progesterona, junto con los estrógenos, forman un dúo hormonal fundamental para la reproducción femenina. Mientras los estrógenos estimulan el crecimiento del revestimiento uterino, la progesterona lo prepara para recibir un óvulo fecundado.
Además de su papel en el ciclo menstrual, influye en la salud ósea, protegiendo contra la osteoporosis. Sus niveles fluctuantes a lo largo de la vida pueden afectar el estado de ánimo y el bienestar general. Por ello, es una hormona clave en tratamientos para la infertilidad, la menopausia y otros desequilibrios hormonales.
Progesterona y embarazo: usos y aplicaciones
Si el embrión se implanta, el cuerpo lúteo sigue produciendo progesterona hasta que la placenta toma el relevo alrededor de la décima semana de gestación. Durante el embarazo, esta hormona mantiene el útero en condiciones óptimas, espesa el moco cervical para prevenir infecciones y estimula el crecimiento de las glándulas mamarias, preparando el cuerpo para la lactancia.
En tratamientos de fertilidad como la inseminación artificial (IA) y la fecundación in vitro (FIV), la progesterona es esencial. Se administra de manera exógena para recrear el entorno hormonal adecuado, facilitando la implantación del embrión y el desarrollo del embarazo. Hay diversas presentaciones de progesterona disponibles en el ámbito médico para estos fines.
- Pastillas orales: indicadas para regular ciclos menstruales o en terapia hormonal sustitutiva.
- Inyecciones: recomendadas en casos de deficiencias graves de progesterona o cuando otras formas no son adecuadas.
- Óvulos vaginales: se utilizan frecuentemente para el soporte de la fase lútea en tratamientos de fertilidad.
También se administra progesterona para evitar abortos espontáneos en mujeres con historial de pérdidas frecuentes o con riesgo de embarazo. Este respaldo hormonal garantiza la receptividad del endometrio y que el embarazo temprano se desarrolle en las mejores condiciones posibles.
¿Puedo usar esta hormona sin supervisión médica?
Ninguno de estos métodos se puede aplicar sin la intervención de especialistas médicos, puesto que este tratamiento suele ser sumamente delicado para el cuerpo de la mujer y puede presentar algunos efectos secundarios que bien podrían agravar otras condiciones y desequilibrar el delicado ecosistema hormonal si no se es administrado y supervisado por un profesional.
Aunque la progesterona es esencial para la reproducción, un desequilibrio en sus niveles puede causar efectos secundarios como hinchazón y somnolencia. Por ello, los médicos controlan de cerca estos niveles, especialmente en tratamientos como la FIV. Unos niveles bajos pueden dificultar la implantación del embrión, mientras que unos niveles altos pueden requerir ajustes en el protocolo.
Subrogación: una alternativa para cuando falla todo lo demás
A pesar de los avances en reproducción asistida, no todos los tratamientos tienen éxito para todas las personas, ya que factores como la salud general, la edad y las condiciones médicas subyacentes pueden influir en los resultados. En estos casos, alternativas como la gestación subrogada pueden ser una opción viable mucho más segura y eficaz.
Esta alternativa permite que personas o parejas que no pueden gestar por sí mismas alcancen la paternidad con la ayuda de una candidata gestante, de la mano de expertos médicos especialistas en métodos alternativos de concepción.
Family Aims: hacemos posible lo imposible
El camino hacia la gestación no es nada fácil, y aunque la ciencia nos brinda hoy en día muchas herramientas y técnicas para incrementar las posibilidades de un embarazo exitoso, muchas veces es mejor optar por alternativas más efectivas como puede serlo la gestación subrogada.
En Family Aims entendemos la complejidad sentimental del proceso y las numerosas vicisitudes que los padres enfrentan, por eso, ponemos a su disposición nuestros servicios de gestación subrogada y los conectamos con clínicas expertas en fertilidad y portadoras gestantes, acompañando a los padres en cada una de las etapas de este proceso hacia la formación de su familia ideal.
Si estás evaluando esta opción y deseas mayor información sobre lo que una agencia de gestación familiar puede ofrecerte, te animamos a continuar leyendo nuestro blog.